Testimonios | Centro Vida Nueva Navarra

"Mirando atrás en el tiempo puedo ver perfectamente en mi testimonio que ocurre cuando no se cortan a tiempo las malas hierbas… pero ¡Gracias a Dios, un día Cristo vino a mi vida!" En mi infancia era un niño aparentemente normal, vivía junto a mis padres y mi hermano, jugaba al fútbol e incluso se levantaba en mi mucha sensibilidad con las personas que me rodeaban, pero muy pronto ese camino empezó a torcerse. Pronto comencé a tener conductas que no eran normales y mi madre decidió llevarme al psiquiatra. Su primer diagnóstico fue que sufría celos hacia mi hermano y una dependencia muy fuerte hacia mi madre, ahora sé que lo que empezaba a brotar en mí era el orgullo pero nadie supo ponerle nombre. A esa edad tuve mi primer contacto con chicas mayores que yo y recuerdo sentirme confundido. Aun así seguí esta trayectoria, viendo lo que no debía, y haciendo las cosas mal, lo que causó en mí un desorden en ese área además de una fuente de problemas para mí y los que me rodeaban.